En Barcelona se denuncia al régimen cubano

En Barcelona se denuncia al régimen cubano.Por Omar Rodríguez Saludes.

Cuatro cubanos acaban de partir de Barcelona. Son tres expresos políticos, del grupo de los 75, y una Dama de Blanco, todos recién llegados a España. Son ellos: Antonío Díaz Sánchez, Adolfo Fernández Sainz, su esposa  Julia Esther Núñez Pacheco y Omar Rodríguez Saludes. Cumplimentaron, ellos, la invitación que les hizo el Consejo General del Partido Radical No violento, Transnacional y Transpartido, para que participaran en sus sesiones a desarrollarse del 3 al 5 de Septiembre en el Centro de Cultura Contemporánea de la capital catalana.

Este evento sirvió de tribuna para denunciar la deplorable situación de derechos humanos en diferentes países. Larga fue la lista de parlamentarios, académicos, y activistas de derechos humanos que intervinieron, procedentes de Europa, África y Asia. A pesar de no estar incluida en los discursos  planificados, Cuba tuvo su espacio a través de los exiliados presentes en el evento.

El periodista independiente Adolfo Fernández Sainz, fue el primero en hacer uso de la palabra. Lo hizo en la mañana del viernes tres, poco después del inicio oficial del mencionado encuentro. En su improvisada intervención, Sainz hizo puntual resumen sobre todo el proceso de arrestos, juicios, condenas y prisión, contra un grupo de 75 pacíficos opositores llevado a cabo en marzo del 2003 por el régimen de Fidel Castro. A esta ola represiva, ejecutada contra hombres no violentos, se le conoce en el mundo  con el nombre de Primavera Negra.

Poco después, en la tarde, Rodríguez Saludes, quien se desempeño, durante años, como reportero gráfico en la prensa independiente dentro de la isla, agradeció a varios de los presentes el apoyo y solidaridad que ellos brindaron, desde Europa y hasta dentro de Cuba, a la causa de los 75 y las Damas de Blanco. “Esa solidaridad nos ayudó mucho a vivir el encierro en nuestras celdas; nos hacia entender que no estábamos solos”, señalo Saludes, quien expuso algunas de las vivencias, personales y familiares, durante todo su periodo en cautiverio.

“La lucha no violenta ha sido un arma eficaz para que los pueblos logren sus reivindicaciones “, dijo Antonio Díaz, en la mañana del sábado 4, en una muy escuchada y aplaudida alocución. Además de repasar la historia del Movimiento Cristiano Liberación, durante sus 21 años de existencia dentro de Cuba, el expreso político, miembro fundador de esa agrupación opositora, pidió a los delegados presentes, apoyar la propuesta de candidatura de Oswaldo Paya Sardiñas, Coordinador Nacional del MCL y gestor principal del Proyecto Varela, par el Premio Nobel de la Paz. “Para nosotros y para la causa cubana, sería un honor y de suma utilidad, contar con vuestro apoyo”, acotó, Díaz, antes de finalizar.

Las voces y reclamos de las Damas de Blanco fueron escuchadas el domingo 5, ultimo día de sesión del Consejo General del partido dirigido por Marco Panella y Emma Bonino. Julia Esther Núñez, destacada integrante de ese grupo de mujeres, que aún marcha por las calles cubanas con sus emblemáticos vestidos blancos y un gladiolo en la mano, explicó como y por qué se gestó esta agrupación femenina, dedicada a reclamar en forma pacífica la libertad de todos los presos políticos cubanos. Julia narró el acoso, la represión y las golpizas que las Damas de Blanco sufren de manos de la policía política del régimen castrista. Para ilustrar su descripción Julia Esther, mostró a la sala una foto en la que se aprecia a dos Damas de Blanco en el instante en que son arrastradas por las fuerzas represivas comunistas.

Los tres ex prisioneros de conciencia y la Dama de Blanco, en sus discursos, no dejaron de mencionar a Orlando Zapata Tamayo, preso político fallecido en febrero último, tras una prolongada huelga de hambre, y a Guillermo Fariñas, quien mantuvo hasta julio pasado un ayuno de 138 días, en reclamo de la liberación de los presos políticos en la isla.

Los excarcelados coincidieron en pedir a la Unión Europea que no levante la Posición Común que mantiene contra el gobierno cubano. Ellos consideraron que la “deportación” a España a que están siendo sometidos los prisioneros de la “Primavera Negra” no se puede interpretar como una mejora de los derechos humanos en Cuba.

Fueron tres jornadas provechosas en Barcelona, en las que se denunciaron las flagrantes violaciones de los derechos humanos en la Mayor de las Antillas. Los contactos directos que tuvieron los cuatro cubanos con los delegados de la convención, también fueron oportunidades estrechas para exponer la realidad de la isla. La solidaridad hacia la oposición cubana se pudo constatar en las continuas felicitaciones y apretones de manos que ellos recibieron en cada oportunidad