Cualquier fórmula que no sea la ayuda incondicional al régimen de la Habana, será desechada por los que hoy se creen dueño del destino de la Nación cubana. Es por eso que se impone cada vez más la necesidad de un apoyo de la comunidad internacional a la oposición pacífica dentro de la Isla de Cuba, que busca cambios pacíficos mediante un referéndum contemplado incluso en las propias leyes del País. El Proyecto Varela es la solución.

El pasado 25 de Noviembre los Ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea analizaron el estado de las relaciones con el gobierno de Cuba. Las conclusiones de dicho análisis han generado en algunos sectores políticos cierto optimismo, que a nuestro parecer para nada refleja los reales resultados de la reunión y mucho menos coincide con la intención plasmada en la Posición Común.