Noticias sobre Cuba en la Prensa Internacional

Agencias

Noviembre 2 de 2010

Según el ministro de Comercio Exterior, el déficit de la balanza comercial se había reducido en un 7% al finalizar el tercer trimestre de 2010.

El gobierno intentó transmitir este lunes un mensaje de tranquilidad a sus socios extranjeros sobre los ajustes económicos emprendidos que, según la versión oficial, han empezado a dar resultados positivos y contribuirán a fortalecer las relaciones.

«Nuestros socios económicos en todo el mundo pueden estar tranquilos en el sentido de que los resultados del proceso de actualización de nuestro modelo económico contribuirá a fortalecer nuestras relaciones», dijo el ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, en la inauguración de la Feria Internacional de La Habana (FIHAV 2010), considerada el mayor foro comercial y empresarial de Cuba y que este año reúne a firmas de 52 países, reportó EFE.

Insistió en que todos los pasos que el régimen está dando en materia económica van dirigidos a mejorar la efectividad de la gestión, elevar la eficiencia y mantener «las conquistas del socialismo».

El ministro aprovechó el acto para ofrecer resultados positivos, entre los que destacó la reducción en un 7 por ciento del déficit de la balanza comercial de bienes de la Isla.

De acuerdo con sus datos, al finalizar el tercer trimestre de 2010 las exportaciones de mercancías de Cuba presentaban un incremento del 21 por ciento respecto al mismo periodo de 2009, mientras que las importaciones sólo crecieron un 1 por ciento.

Esta «discreta» mejoría de la balanza comercial ha propiciado el aumento de los ingresos del país y permitido afrontar parte de los problemas de liquidez que afectan desde el pasado año tanto a las empresas cubanas como a sus «contrapartes» extranjeras, dijo Malmierca.

Las medidas económicas adoptadas por el gobierno «permitirán aumentar la eficiencia económica, el ahorro en recursos y el avance consolidado en el saneamiento de nuestras finanzas externas asegurando definitivamente la capacidad de dar cumplimiento de manera gradual a todos los compromisos adquiridos», agregó.

No obstante, también advirtió sobre factores negativos que —dijo— afectan al desarrollo cubano, entre los que mencionó el embargo de Estados Unidos, la crisis económica internacional y los efectos del cambio climático.

A la Feria Internacional de La Habana asisten este año 2.000 expositores. El país con mayor representación es España, seguida de Canadá, China, Italia, Panamá, Venezuela y Brasil.

De acuerdo con la AP, ningún funcionario cubano estuvo disponible para informar sobre las firmas estadounidenses en la Feria.

En 2009, cifras oficiales indicaron que las compras a Estados Unidos alcanzaron los 729 millones de dólares, con una caída del 30% en relación con el año precedente. La cifra ha continuado descendiendo.

Más de 300 empresas extranjeras realizan algún tipo de inversión en Cuba, cuyos principales socios comerciales son Venezuela, China, Canadá y España.

Malmierca indicó que actualmente se está realizando un «reordenamiento» de las empresas extranjeras con presencia en la Isla, como socios en firmas mixtas o asociaciones, pero no ofreció más detalles.

En la Feria de La Habana celebrada en 2009 el gobierno cubano firmó contratos por 150 millones de dólares, lo que significó una fuerte caída respecto a los 350 millones de 2008.

Comercio
El intercambio España-Cuba se recuperó ligeramente en 2010

Agencias

Noviembre 2 de 2010

El embajador en La Habana alaba el esfuerzo de las autoridades cubanas para solucionar el problema de las retenciones de fondos de empresas españolas.

El intercambio comercial entre España y Cuba se recuperó ligeramente entre enero y agosto de 2010, tras la fuerte caída que experimentó el año pasado, según datos ofrecidos por el embajador español en La Habana, Manuel Cacho, reportó EFE.

En los primeros ocho meses de este año, las exportaciones de España a Cuba crecieron un 7,8 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior y alcanzaron los 335 millones de euros, mientras que las ventas desde La Habana aumentaron un 6,5 por ciento hasta llegar a 79 millones de euros.

En 2009, la crisis económica internacional afectó gravemente al flujo comercial entre ambos países: las ventas de España a Cuba cayeron un 40 por ciento y un 27 las compras a la Isla.

El embajador comentó las cifras este lunes, en la inauguración del pabellón español en la Feria de La Habana (FIHAV 2010) donde destacó la «evolución positiva» del intercambio comercial a lo largo de 2010.

Cacho alabó el esfuerzo de las autoridades cubanas en los últimos seis meses para solucionar el problema de las retenciones de saldos bancarios correspondientes a pagos por exportaciones de empresas españolas.

«Confiamos en que el esfuerzo se extienda a los saldos de operaciones financieras y algunos saldos de operaciones comerciales», dijo el embajador.

Los problemas de financiación y liquidez en Cuba provocaron el año pasado retrasos en el pago de deudas y retención de fondos en cuentas bancarias de empresarios españoles.

En el acto de este lunes, al que asistió el viceministro de Comercio Exterior cubano, Antonio Carricarte, Manuel Cacho reiteró la capacidad y voluntad de las empresas españolas de continuar trabajando en colaboración con Cuba para recuperar, e incluso superar, el alto nivel que el flujo comercial entre ambos países alcanzó hace unos años.

España es uno de los cuatro mayores socios comerciales de Cuba —por detrás de Venezuela, China y Canadá— y más de 200 empresas españolas cuentan con oficinas de representación en la Isla, según recordó el viceministro Carricarte.

Estas compañías españolas están presentes en al menos 21 sectores económicos de Cuba.

España participa este año en la FIHAV 2010 con un pabellón de unos 1.700 metros cuadrados que aglutina a 75 empresas, siete más que el año pasado, lo que le convierte en el país con mayor representación en la feria, considerada el evento de negocios más importante de la Isla.

Cuba afianza su capitalismo de Estado con las reformas

El Gobierno necesita reducir con urgencia su abultada nómina de trabajadores

(Reuters)

FRANK LÓPEZ BALLESTEROS |  EL UNIVERSAL

Noviembre 2 de 2010

El gobierno cubano puso en marcha un conjunto de reformas que buscan oxigenar las apretadas arcas del Estado, por lo que ante el excesivo grado de subvenciones ha implementado cambios que en el fondo se asemejan a los aplicados en países de modelo capitalistas.

Raúl Castro se dispuso a triplicar el sector privado para absorber a 500.000 empleados públicos que serán despedidos en los próximos seis meses y reducir así el costo del Estado, el cual aglutina el 80% de la masa laboral del país.

La semana pasada se publicó la lista de las tasas impositivas que pagarán los trabajadores por «cuenta propia» autorizados por Castro, que serán tan elevadas como las que se pagan en Dinamarca (59.0%), Suecia (56.4%) y Bélgica (53.7%), según datos de la oficina de estadísticas de la Unión Europea.

Trabajadores independientes por ejemplo, deberán cancelar al Fisco cubano un impuesto de renta de 25% al 50%; 10% sobre ventas o servicios, 25% por contratación de fuerza de trabajo y 25% de contribución al seguro social.

Pero en Cuba, un país donde el sueldo promedio mensual es de 20 dólares, y 95% de la economía depende del Estado, las ganancias terminarán siendo escasas, un hecho que no desanima del todo a los habitantes de la isla, dispuestos a desempeñar algunos de los 178 oficios autorizados recientemente.

El economista cubano Oscar Espinosa, explica que la alta carga impositiva se debe a la falta de recursos del Estado para la financiación, que del todo «no quiere darle independencia a los trabajadores… por eso no podrá ofrecer insumos a precios mayoristas para que la gente obtenga ventajas comerciales. Lo que estamos presenciando es una forma de capitalismo de Estado a lo cubano».

Espinosa recordó que en esas «reformas curiosas», Castro duplicó en julio de 50 años a 99 años los derechos de uso de tierras del Estado por parte de inversores extranjeros para construir campos de golf y viviendas de lujo para extranjeros.

«Ahora hay contradicciones sobre el viejo discurso del comunismo, pero estamos viendo algunos cambios que eran necesarios», acotó.

Cuba tiene una fuerza laboral de cinco millones de personas y solo 143.000 trabajan por su cuenta, y con las 500.000 personas que quedarán sin trabajo hasta 2011, no se tiene previsto indemnizaciones, aunque un cierto número podrá cobrar ayudas contra el desempleo.

El Gobierno de La Habana anuncia reglas para apertura de negocios

Agencias

Octubre de 2010

Los cuentrapropistas deberán inscribirlas y pagar cuatro tributos: un impuesto del 25% al 50% sobre la renta, un 10% sobre ventas o servicios, un 25% por contratación de empleados y un 25% de cotización a la seguridad social

El Gobierno de Cuba anunció el lunes controles e impuestos —como el de renta de hasta el 50%— que regirán los nuevos pequeños negocios privados, en el plan de recorte de 500.000 empleos estatales, la medida de mayor impacto de las reformas con que busca levantar la maltrecha economía cubana.

Las regulaciones fueron publicadas en dos números de la Gaceta Oficial —también en Internet (www.gacetaoficial.cu)— agotados a primera hora en estanquillos, echando a andar el proceso de reforma laboral anunciado en agosto por el presidente Raúl Castro.

El Gobierno autorizó 178 oficios del llamado trabajo “por cuenta propia” para ampliar el exiguo sector privado, a fin de que absorba a la mayor parte de 500.000 empleos que eliminará de aquí a marzo de 2011, primera etapa de un plan para eliminar en cinco años más de un millón de puestos que sobran en el Estado, el 20% de su fuerza laboral.

La mayoría de esas actividades se realizan ilegalmente —muchas con tolerancia oficial—, pero los cuentrapropistas deberán inscribirlas y pagar cuatro tributos: un impuesto del 25% al 50% sobre la renta, un 10% sobre ventas o servicios, un 25% por contratación de empleados y un 25% de cotización a la seguridad social, según lo publicado en La Gaceta.

El impuesto sobre la renta se regirá por una escala que parte del 25% para ingresos de 5.000 pesos cubanos (unos 200 dólares) al año hasta el 50% —uno de los más altos de América Latina— para los superiores a 50.000 pesos (unos 2.000 dólares).

El empleo de mano de obra fuera de la familiar es novedad y se permitirá en 83 de las 178 actividades, lo que abre vía a la pequeña y mediana empresa —abolida en 1968 por Fidel Castro—, pero el impuesto que lo grava se calcula sobre las remuneraciones a cada trabajador —si se contratan muchos se paga más— para evitar “concentración de riqueza”, según el diario Granma.

Hasta 2009, había registrados en Cuba 143.000 pequeños negocios —con mano de obra familiar— autorizados en los años 90 para hacer frente a la crisis económica por la caída de la Unión Soviética, sostén de la Isla durante tres décadas.

En Cuba, donde rigen el peso cubano y el convertible (CUC, 1 equivalente a 1,20 dólar), el Gobierno permitirá también a los cubanos alquilar sus casas en CUC a extranjeros, además de en moneda nacional a los cubanos, así como rentar espacios para pequeños negocios. Para los arriendos en moneda fuerte, el impuesto mensual por una vivienda de una habitación será de 150 CUC —aumentará un 50% por cada cuarto si tiene más—; por el alquiler de una habitación serán 200 y el de espacios irá de 20 a 100.

Las medidas de Raúl Castro, quien sustituyó en el mando a su hermano Fidel hace cuatro años, suponen cambios considerables en un país de economía controlada en el 95% por el Estado, sin cultura impositiva y donde la iniciativa privada es casi nula.

El Gobierno lleva a cabo una intensa campaña para lograr que los cubanos, que tienen salud y educación gratuita, alimentación y servicios subsidiados, aprendan a pagar impuestos, y anunció que aplicará “todo el peso de la ley”, con altas multas, decomisos y confiscaciones, a los que evadan impuestos o irrespeten normas.

Muchos recibieron las medidas como opción de empleo y de mejorar su nivel de vida, pues el Estado paga 20 dólares de salario al mes, pero otros se muestran pesimistas por el peso de los tributos, la falta de un mercado mayorista de insumos o de materia prima, o excesivos controles.

Economistas cubanos advierten de que la reforma laboral podría disparar el desempleo si no está acompañada de medidas de estímulo y ayuda a la iniciativa privada, como créditos —en estudio, pero aún no anunciada por el Banco Central— o el permiso a los cuentrapropistas de importación de insumos, ante la incapacidad del Estado de abrir un mercado mayorista. “Falta acompañar estos cambios con leyes que creen confianza para la inversión de esfuerzos y dinero en emprendimientos privados”, advirtieron los economistas Pavel Vidal y Omar Everleny Pérez en la revista católica Espacio Laical.

Disidentes socialdemócratas tachan las reformas de “neoliberales”

Piden la renuncia del principal dirigente sindical de la Isla

Agencias, Madrid

Octubre de 2010

El grupo disidente cubano Arco Progresista denunció el martes que las últimas medidas económicas y ajustes laborales del Gobierno de Raúl Castro significan una apertura al “neoliberalismo tardío”, y pidió la renuncia del principal líder sindical en la Isla.

Manuel Cuesta Morúa, portavoz de este colectivo socialdemócrata, presentó en rueda de prensa en La Habana un documento que recoge la posición del grupo ante las reformas laborales anunciadas en septiembre pasado, y en el que acusan al Gobierno de no haber sido “socialista” nunca.

“Toda la izquierda revolucionaria mundial y buena parte de la izquierda socialdemócrata ha apoyado un proyecto político que culmina como una gran farsa social”, dice el texto, que se pregunta “a qué clase social representa el Gobierno cubano”.

El documento reacciona así a la decisión del Gobierno de eliminar medio millón de empleos públicos en los próximos cinco meses y flexibilizar el trabajo por cuenta propia y el cooperativismo, lo cual fue divulgado por la Central de Trabajadores de Cuba (CTC, sindicato único).

Arco Progresista afirma que la CTC “ha traicionado” a la clase obrera por convertirse en “vocera del Gobierno, en vez de defensora de los trabajadores”, y apunta que esa actitud la reafirma como “una empresa burocrática al servicio de las patronales”.

Además, pide la renuncia del secretario general de la Central, Salvador Valdés, pues “su actitud constituye una ruptura con la historia y la postura de los más importantes líderes obreros cubanos y latinoamericanos”.

“La combinación de despidos masivos con el modo en que se reintroduce el trabajo por cuenta propia y con un nuevo proyecto junto al capital extranjero, que se oculta a los ciudadanos cubanos, constituye la apertura al neoliberalismo tardío, duro y primario”, añade el texto.

En ese sentido, denuncia que en la Isla hay otros rasgos del “típico modelo de modernización neoliberal arcaico” como la “ambigüedad del tejido legal”, la “vigilancia y ahogo” de la sociedad civil y “la creación de una burbuja feliz para los sectores militares y represivos”.

Entre sus “razones políticas”, el documento también discrepa de que las medidas del Gobierno sean “reformas estratégicas” y considera que se trata de una “respuesta caótica frente a la crisis estructural” que vive Cuba.

La ONU está ‘agotada’ y debe ser cambiada: Fidel Castro

Noviembre 2 de 2010

Notimex Escritor

AOL Noticias.com

Fidel CastroLa Habana- El ex presidente cubano Fidel Castro consideró que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) «está ya agotada» y debe ser cambiada por un foro verdaderamente democrático y «no un feudo imperial».

Castro dedicó este martes por segundo día consecutivo su columna «Reflexión» a la votación del 26 de octubre pasado de la Asamblea General de la ONU que reclamó el cese del embargo económico de Estados Unidos por 187 votos a favor, dos en contra y tres abstenciones.

Como en el anterior artículo, titulado «La sublevación en la ONU», Castro reprodujo extensos tramos del discurso pronunciado ese día por el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez, así como su réplica a los representantes de Washington y la Unión Europea.

El líder cubano, de 84 años, instó a impedir que «nos impongan el ridículo papel de reunirnos una vez más dentro de 12 meses para burlarse de nosotros. Hagamos sentir nuestra demanda y salvemos la vida de nuestra especie antes de que sea ya demasiado tarde».

Consideró que «la ONU no puede existir sin la presencia de los pueblos que vienen exigiendo el cese del bloqueo» con el cual «la superpotencia no ha podido ni podrá derrotar a la Revolución Cubana».

El ex mandatario cubano opinó que la comunidad internacional ha sido subordinada a «los intereses de Estados Unidos y de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte)», a la que describió como una «organización militar belicista».

El artículo de Castro, que incluyó también los principales fragmentos de la réplica del jefe de la delegación de Estados Unidos, Ronald D. Godard, permitió a los lectores cubanos conocer los argumentos de Washington para mantener las sanciones de casi medio siglo a las isla.

«Estados Unidos (…) está firmemente comprometido con el apoyo al deseo del pueblo cubano de determinar libremente el futuro de su país», dijo el embajador Godard.